martes, 11 de marzo de 2014

Un poco de ti, para la vida de otro.

Existen enfermedades, que hacen que uno o más de los órganos de una persona, dejen de funcionar; como el mecanismo de un reloj que un día decide dejar de funcionar, dejando a un lado su mecanismo casi impecable, casi. A menos que se pueda sustituir el órgano, o por lo menos reemplazar su función, la persona afectada muere; si no encuentras la pila adecuada, o el tornillo de dos milímetros que se calló por debajo de la mesa lo único que te queda es guardarlo en el cajón, pierde cuando deja de funcionar.
El tratamiento preferente para una gran parte de las personas con insuficiencia terminal de órganos importantes, es el trasplante de órganos, los cuales la mayoría tienen índice de éxito. Un número cada vez mayor de trasplantados sigue viviendo veinte años después de la operación, y la mayoría sobrevive por lo menos cinco años.

Un trasplante consiste en trasladar un órgano, tejido o conjunto de células de una persona (donante) a otra (receptor), o bien de una parte del cuerpo a otra en un mismo paciente. El donador del órgano o tejido no necesariamente deber ser una persona con vida. Si una persona donadora sufre muerte cerebral, sus órganos pueden ser conservados por medio de diversos métodos con la intención de que su funcionamiento no se vea afectado y sea de utilidad para otro paciente que los requiera; si te es imposible encontrar el tornillo de dos milímetros siempre tendrás la opción de sustituirlo por uno del reloj de la tienda de al lado, o de la siguiente, la que se encuentra a cinco manzanas de tu casa, solo tienes que buscar y encontrar, tornillos compatibles y relojes generosos. Aún y cuando la idea de trasplantar un órgano o un tejido pueda parecer sencilla , existen diversos limitantes que hacen que esta no sea una tarea fácil. Cuando el trasplante no proviene de la misma persona o de alguien genéticamente idéntico antes de realizar cualquier procedimiento se debe tomar en cuenta la "compatibilidad"que exista entre el donante y el receptor. De no ser así, el sistema inmunológico del receptor reaccionará de manera negativa al transplante y lo rechazará poniendo en riesgo el procedimiento y la vida del paciente. 

Después de la operación de implante, para evitar el rechazo inmunitario, se administran unos fármacos llamados inmunosupresores, que disminuyen la respuesta de defensa del receptor. 
Aunque estas sustancias han hecho posible los trasplantes, tienen muchos efectos secundarios; por esta razón es mejor administrar la menor dosis posible. Y a mayor compatibilidad entre donante y receptor, menor cantidad de inmunosupresores.

Tipos de trasplantes:
TEJIDOS


CÓRNEA
HUESOS








PELO
PIEL
SANGRE
VÁLVULAS DEL CORAZÓN



ÓRGANOS:



CORAZÓN
HÍGADO
INTESTINO
PÁNCREAS
PULMÓN
RIÑÓN


CÉLULAS:
  • Células de páncreas.
  • Células progenitoras hematopoyéticas.

                         
Los órganos para el trasplante se obtienen de personas que ceden sus órganos después de morir, para que puedan ser utilizados con este fin. Pueden obtenerse también de donantes vivos cuando el órgano a donar es doble, riñón, o puede ser fragmentado, hígado.

Ciertos receptores de órganos más complejos, como el corazón, han de ser controlados de forma continua, por lo que un trasplante de corazón se considera un tratamiento más que una cura. Tienen que tomar medicamentos de por vida, pero pueden vivir como si no tuviesen la enfermedad.

Con todo, más de cien mil trasplantes realizados en el mundo y medio siglo de aplicación de una técnica son razones más que suficientes para que se acepte como rutinaria. 




Las estadísticas de 2006 revelan que España encabeza la lista mundial en donaciones por decimocuarto año consecutivo, ochos puntos por encima de EEUU. Los 33,8 donantes por millón de habitantes españoles, frente a las 18,8 donantes del conjunto de UE superan, además, la barrera de los 1.500 donantes, con un total de 3.756 trasplantes y un record histórico en la sustitución de pulmón e intestino.

España ha reforzado su liderazgo mundial en el trasplante de órganos, con un 14,3% del total de los realizados en la Unión Europea en 2008.


ONT
Para facilitar la donación y el trasplante de órganos, tejidos y células en España existe un organismo, la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), que establece sistemas de organización internacional.

"Más de 5.000 enfermos                     A pesar de este escenario optimista, aún             
españoles esperan recibir               quedan cuestiones por resolver: las listas             
 un órgano sano,                            de espera. Según las estadísticas de 2006 hay más
especialmente riñón, hígado           5.000 enfermos españoles esperando para recibir 
 y pulmón"                                     un órgano sano, especialmente riñón, hígado y, pulmón. 
Para acortar la lista de espera, el trasplante de donante vivo es una de las opciones a tener en cuenta.

Los avances de la Medicina hacen ahora posible la sustitución de varios órganos lesionados. Por tanto, desde hace algo más de veinte años, el número de personas que viven gracias al trasplante de un órgano vital es cada vez mayor. 

La consecuencia es que la demandava muy por delante de la disponibilidad de órganos. El equilibrio solo podrá lograrse mediante la combinación de varias medidas educativas o legales que lleguen a permitir la recuperación de todo órgano aceptable desde el punto de vista médico.
Estas razones han hecho crecer el interés por el uso potencial de donantes animales, lo que se conoce como xenotrasplantes; pero no apotarán una solución práctica al problema de la escasez de órganos hasta que las barreras inmunológicas que dificultan el trasplante entre especies se solucionen. 
Mas allá de los xenotrasplantes, el futuro mira hacia los autotrasplantes que harían posibles las células madre, estas tendrían la capacidad de generar órganos y se evitaría el rechazo del paciente. 




Actualmente existe una norma jurídica que regula los trasplantes de órganos, la llamada "Ley de trasplantes".

El trasplante como una puerta hacia la vida.